Colaboración de las familias
Creemos que la comunicación y la colaboración con las familias es uno de los pilares fundamentales de nuestro trabajo.
Por ello les proponemos:
- Amplia fase de adaptación al grupo, con el padre o la madre a disposición, para que la niña o niño pueda vivir esta transición suavemente y en confianza. Así l@s adult@s también pueden experimentar cómo trabajamos y saber en qué manos dejan a sus tesoros.
- Participación parental amplia en las actividades de grupo.
- Dos o tres reuniones al año de cada familia (madre, padre o ambos) con, por lo menos, un educador. El fin de estas reuniones sería mantener una estrecha comunicación y coordinar el trabajo educativo.
- Una reunión de madres y padres al mes (a la que asistirán el equipo pedagógico y las madres y padres de tod@s los niñ@s) para: informar sobre el desarrollo y las actividades actuales del grupo, intercambiar opiniones y deseos, planificar y coordinar actividades, intercambiar experiencias, discutir temas de la educación, implementar una “escuela para madres y padres”, etc.
- Durante una semana, en turnos rotativos, cada familia se encargará de proveer al grupo de fruta, verdura y frutos secos.
- Jornadas de limpieza del sitio utilizado para que nuestra actividad tenga un impacto positivo, aportando cuidado y gratitud hacia nuestro entorno.
- Disponibilidad, por parte de las madres y padres, para un posible acercamiento del grupo, posibilitandoles así, el aprendizaje de su actividad cotidiana (ámbito laboral, aficiones, habilidades, etc.).
- Celebración de fiestas temáticas con alto valor social y cultural.
- Provisión de materiales puntuales para actividades concretas.